Existen pocos precedentes en las fiestas religiosas de las últimas décadas en las que primero se haya buscado la fiesta porque sí, el día, la disculpa para celebrar una buena romería, y después, en el santoral, se haya señalado al santo que encaja en esta fecha concreta. Y además se compró un campo para tal fin, allá por 1913, se erigió posteriormente una capilla, y se creó la talla sagrada con el mismo propósito festivo. El resultado: una cita en la que abunda la sidra, los cánticos y la devoción fervorosa por el santo y la fiesta de nuevo cuño.
Todos los 22 de agosto la localidad de Luarca celebra sus fiestas de San Timoteo. La villa luarquina es un hervidero de gente que se reúne en el Campo de San Timoteo para cantar el cumpleaños feliz al santo y degustar con familia y amigos una comida campestre.
Las fiestas de San Timoteo comienzan en la noche del 21 de agosto con traca de fuegos artificiales y verbena. Al despertar el día 22 se lanzan petardos y da comienzo el desfile de peñas por las calles de la villa. Charangas venidas de distintas partes de la geografía asturiana acompañan a Gigantes y Cabezudos, que no dudan en dar latigazos con sus artesanales látigos. Los muñecos Telma y Pinón, con los chambrones timoteínos, son parte del atractivo del desfile. Recorren las calles más céntricas entre el paseo del muelle y la avenida de Galicia, para diversión de niños y adultos, y se encaminan hacia la ermita.
La ermita está en el llamado Campo de San Timoteo, lleno de carpas a la espera de los romeros, que van llegando con grupos de gaiteros y charangas.
Los timoteínos van vestidos con chambrón, el habitual es de cuadros azules y blancos, aunque a día de hoy los diseños son muy variados, no sólo en colores, sino con barcos piratas, con estampados florales… bastón de madera y la T de pan al cuello.
Una vez se llega a la ermita, se realiza la misa y se saca al santo a una capilla exterior en procesión. Se canta la clásica canción San Timoteo, eo, eo, eo con numerosos bastones al aire, algo muy típico de la romería. Después de la sencilla ceremonia, comienza el almuerzo romero, en los campos que rodean la ermita.
Al final de la tarde, el público presente en el prao iniciaría la marcha hasta la plaza Alfonso X el Sabio, donde le esperaba la verbena nocturna.
San Timoteo es una Fiesta de Interés Turístico del Principado de Asturias.
Texto: © Ramón Molleda para asturias.com