El enclave de Cadavedo fue galardonado con el premio pueblo más bonito de Asturias en 1954. Ocupa hoy en día lo que antaño fuese el emplazamiento del puerto medieval de Vallenarán, que se dedicaba a la caza de ballenas. Se trata de un pequeño laberinto de callejuelas asfaltadas entre hórreos superpuestos, casinas con jardines cuidados y presumidas villas indianas.
Cadavedo: La Regalina
Nos arrimamos más a la costa, ascendemos a la llamada Capilla de La Regalina, donde se celebra una fiesta declarada de interés turístico nacional y cada año reúne a cientos de visitantes. Es una de las fiestas con más popularidad en el concejo valdesano y con mayor proyección cultural del verano de Asturias. Fue en el año 1931 cuando el Padre Galo, poeta y escritor, fundó esta tradicional romería. La Virgen de la Regla, que da nombre al lugar, apareció en un castaño según cuentan las historias locales y se hizo una colecta para hacer propio el hoy campo de la fiesta, así como para construir la capilla.
Sin bajar aún a la playa, podemos seguir disfrutando de la costa alta. Algo más al oeste está Villademoros, donde se alza un antiguo torreón romano reconstruido por los reyes asturianos en los siglos IX y X.
Texto: © Ramón Molleda para asturias.com
