En Asturias se otorga la categoría de deporte a aquellos trabajos cotidianos del mundo rural que han sido reorientados bajo una buena dosis de rivalidad y competitividad. Para salir victorioso no basta con dominar la técnica, se precisa fuerza bruta y mucha resistencia física. Pruebas sólo al alcance de hombres fortudos, curtidos en las labores más duras del campo y de los bosques.
A lo largo de toda la geografía asturiana no es difícil presenciar alguna de estas exhibiciones en las que se miden distintos equipos que representan a sus municipios o localidades. De esta forma, además de alentar la piquilla, el deporte autóctono crea conciencia de comunidad entre parroquias. Durante la jornada de juegos reina el espíritu olímpico, prima la alegría del esfuerzo y el valor educativo del buen ejemplo. Las pruebas son rápidas y hay que estar muy concentrado y ser muy preciso. Como en el corte con hacha o con tronzón; esté último consiste en hacer astillas con ocho troncos, partiéndolos en cuatro partes cada uno y apilando después cada pieza en un castillete en el menor tiempo posible. También existe la modalidad espectacular de Corta en altura, se sube por un tronco vertical, para lo cual se van haciedo pequeños cortes donde se colocan unas cuñas de madera sobre las que se coloca el leñador, hasta llegar arriba, a unos cuatro o cinco metros, donde se realiza el corte en un sorprendente ejercicio que mezcla fuerza y equilibrio.
Competiciones del deporte asturiano
La carrera de lecheres es otra prueba que no suele faltar. En ella se imita la resistencia de los ganaderos que antiguamente cargaban con las lecheras de 35 litros. Hoy en día, en las competiciones, las lecheras se han sustituido por unos cilindros de hierro macizo con asas de aproximadamente ese peso. La prueba consiste en recorrer con ellas la mayor distancia posible en un tiempo determinado sin apoyarlas en el suelo. En ocasiones es mayor el peso de las lecheras que el de los participantes: una prueba extremadamente dura.
Tiru de cuerda: dos equipos de entre 6 y 8 jugadores cada uno se sujetan con fuerza a una cuerda. En ella se han colocado tres cintas. La del medio indica la mitad de la cuerda, y al empezar tiene que coincidir con una marca en el suelo. El equipo ganador será el que haga pasar la cinta más cercana al otro equipo por la marca del suelo.
Tiru al palu, consiste en tirar de un palo situándose los dos contricantes sentados en el suelo uno frente al otro y con las plantas de los pies apolladas en una tabla. Gana el tirador que logra poner en pie al contrario.
Levantamiento yunque, consistente en levantar un yunque de 18 kilogramos de peso, golpeando abajo en una plataforma colocada a 20 centímetros del suelo y arriba en una chapa colocada a 30 centímetros por encima de la cabeza. Se puede realizar un número determinado de alzadas en el menor tiempo posible o en un tiempo determinado el mayor número de alzadas.
Carrera madreñes: deporte rural que consiste en completar un recorrido hasta alcanzar la meta corriendo; con la particularidad del calzado que emplea el deportista: madreñes, icono de la ruralidad asturiana.
Cucaña: un juego de locomoción en el que se prueba la destreza en la trepa. El juego consiste en trepar por el tronco hasta la cúpula del mismo, que se adorna con motivos festivos entre los que cuelgan los premios. Estos galardones varían según la costumbre local. Botellas de licor, jamones, chorizos o dinero en metálico. La trepa del deportista se ve dificultada debido a las sustancias deslizantes que, en la mayoría de los casos, se aplican a la superficie del tronco, como jabón o sebo.
En estas muestras de deporte no suele faltar tampoco una de las actividades agrícolas por excelencia en Asturias, al menos la más importante del verano en cuanto a intensidad y número de participantes: la recogida de la hierba. Un laborioso trabajo que incluye la técnica del afilado de la guadaña, la propia siega y la manipulación de los pesados fardos.
No faltan modalidades en las que los animales tienen un papel fundamental. Los caballos, por ejemplo, son los protagonistas de pruebas como las carreras de cintas, el arrastre de peso y la doma en el caso de los asturcones. Los gües (bueyes) también son protagonistas de las pruebas de arrastre de peso.
Entre este repaso de las especialidades deportivas más autóctonas, no pueden faltar los bolos, en sus diferentes modalidades: cuatreada, batiente, palma (o birle), celta (o de Tineo), etc.
Información de interés:
En 1991 se fundó el equipo de deporte rural "Seis Conceyos" con el objeto de recuperar una serie de disciplinas que estaban a punto de extinguirse. Esta fecha marca el inicio del deporte rural como competición en plazas de pueblos, villas y ciudades de toda Asturias. Una popularidad que se refrenda en el año 2000, cuando se funda la Federación de Deportes Tradicionales de Asturias.
Actualmente esta institución salvaguarda la esencia del deporte astur organizando certámenes, registrando a los deportistas federados y promoviendo las virtudes de este deporte entre los más pequeños. También se encarga de marcar y perfilar las reglas de juego y las especialidades propiamente asturianas. El Principado presume de salvaguardar una modalidad de deporte que en España encabezan los vascos y en el mundo los neozelandeses.
Texto: © Ramón Molleda para asturias.com